El primer follón.
Como era fácilmente de esperar, el primer follón de la Ley de Dependencia ha sido la constitución del Consejo nacional, el órgano que teóricamente debe decir las políticas a seguir en la materia. La Ley se aprobó por unanimidad, pero a mí eso siempre me pareció algo políticamente correcto, o sea, nada. La Ley es importante, sin duda, pero su desarrollo va a ser una carrera de obstáculos porque el procedimiento de toma de decisiones está viciado desde el principio.
0 comentarios